Ahsoka ha puesto punto y final a su primera temporada con el episodio 8 titulado La Jedi, la bruja y el caudillo, repleto de acción y revelaciones fascinantes, que sin duda no solo marcarán el futuro de la serie sino de Star Wars en general.
Después de lo vivido la semana anterior, ya se preveía que asistiríamos a un último episodio trepidante, como así ha sido, pues durante gran parte de los aproximadamente 43 minutos de metraje real, la acción ha sido una constante. Sin más dilación, vamos a repasar las claves de un episodio, que como los 7 anteriores, nos ha regalado grandes momentos que ya son historia de Star Wars.
Morgan Elsbeth se convierte en una Gran Madre
Nada más comenzar el episodio vemos cómo Morgan Elsbeth (Diana Lee Inosanto) es convertida en una Gran Madre, siendo así reconocida por ser la artífice de encontrar el planeta Peridea y permitir que el Almirante Thrawn, junto con sus tropas y las tres brujas de Dathomir puedan escapar del que ha sido su exilio durante tanto tiempo.
Elsbeth es convertida en una Gran Madre mediante un proceso llevado a cabo por la que se supone líder de las tres brujas, propiciando que una vez finalizado este, al personaje interpretado por Diana Lee Inosanto, le aparezcan unas marcas en el rostro y se le oscurezcan los ojos. Además, se le hace entrega de la Espada de Talzin que ya pudimos ver en la serie de animación Star Wars: The Clone Wars, concretamente en el episodio 19 de la temporada 4, donde se produce el ritual de iniciación de Asajj Ventress.
Ezra construye un nuevo sable láser
Mientras tanto en el interior de la nave de Ahsoka, vemos a Ezra (Eman Esfandi) trabajando en la construcción de un nuevo sable láser, bajo la atenta mirada de Huyang, pues el suyo está ahora en posesión de Sabine. En un momento dado de la escena, Huyang le da un consejo sobre qué piezas utilizar para su ensamblaje, preguntándole a Ezra quien le enseñó a construir este tipo de arma, a lo que él responde que fue su maestro Kanan Jarrus, reconociendo el droide inmediatamente su nombre pues le conocía de su época en el templo Jedi, siendo él quien le enseñó los métodos de construcción del arma por antonomasia de los caballeros Jedi.
Lo interesante de esta escena es que Huyang le da a Ezra una pieza idéntica a la que portaba Kanan en su sable, pues el droide se la proporcionó a este, y se guardaba otra de repuesto por si algún día la necesitaba. De esta forma Ezra honra de alguna manera a su maestro, quien pereció tiempo atrás.
La nave de Ahsoka es atacada
La nave en la que van Ahsoka, Ezra, Sabine y Huyang, está acompañando a los Noti hasta su nuevo asentamiento, cuando de repente son sorprendidos por dos cazas TIE que logran dañarla obligando a un aterrizaje de emergencia, propiciando que quede varada y que Huyang tenga que repararla.
Ahsoka, Sabine y Ezra acceden a la fortaleza
Con la nave muy dañada, no le queda otra a nuestro trío protagonista que buscar otra opción para acceder la fortaleza de Thrawn, y que mejor modo de hacerlo que a lomos de dos Howler, esa especie de animales de Peridea. Bajo un intenso bombardeo por parte del destructor de Thrawn, consiguen acceder a la mencionada fortaleza por la puerta principal, abriendo esta por medio de la fuerza.
Los Death Troopers hacen acto de aparición
Una vez dentro de la fortaleza Ahsoka, Sabine y Ezra deben enfrentarse a un pelotón de Stormtroopers enviado por el Almirante Thrawn (Lars Mikkelsen) para detener su avance. La escena es una auténtica pasada, ya que vemos en acción a los tres personajes juntos, cada uno de ellos con un estilo de lucha diferente, donde por momentos vemos los tres colores de sables láser, creando una gran composición visual. Derrotados todos los enemigos, se produce una circunstancia nunca antes vista en pantalla, y es que las Grandes Madres reviven a los soldados caídos haciendo uso de su magia oscura, dando lugar a los llamados Death Troopers, vistos por primera vez en la popular novela Star Wars: Death Troopers del escritor Joe Schreiber y que son una especie de zombies que se tornan casi imbatibles.
Ahsoka Tano y Morgan Elsbeth vuelven a enfrentarse
Poco después de escapar por los pelos de los Death Troopers, los tres se encuentran a Morgan Elsbeth, esperándoles para impedirles el paso, siendo Ahsoka (Rosario Dawson) la que asume la responsabilidad de enfrentarse a Elsbeth en solitario, el segundo duelo que se produce entre ambas después del que tuvo lugar en el episodio 5 de la temporada 2 de The Mandalorian titulado La Jedi. En esta ocasión con Elsbeth blandiendo la Espada de Talzin, se produce uno de los duelos más espectaculares de la saga, en parte gracias al estilo de combate de Ahsoka.
Sabine por fin hace uso de la fuerza
Durante toda la temporada se ha especulado con el hecho de que Sabine (Natasha Liu Bordizzo) pudiese controlar la fuerza, aún en teoría no siendo sensible a ella. Tras varios intentos fallidos, por fin consigue utilizarla para atraer su sable láser para derrotar a uno de los Death Troopers. En una escena que recuerda en cierta manera a la sucedida en el Episodio VI: El Despertar de la Fuerza, cuando Rey también atrae el sable para enfrentarse a Kylo Ren.
Ezra consigue subir al destructor de Thrawn
El tiempo empleado en derrotar a los Death Trooper, permite que el destructor de Thrawn se vaya alejando de la fortaleza, propiciando que tanto Ezra como Sabine no puedan acceder a él, pues la distancia es demasiado grande para saltar, siendo en este momento cuando Sabine vuelve a confirmar que está en disposición de hacer uso de la fuerza, ya que ayuda a Ezra a acceder a la nave mediante un empujón de la fuerza posteriormente a que este salte.
Ahsoka mata a Morgan Elsbeth
Uno de los momentos más impactantes del episodio llega cuando Ahsoka mata a Morgan, después de ponerla esta en grandes apuros e incluso consigue destruir una de sus espadas láser, Ahsoka acaba con ella asestándola un corte mortal y acabando con la propia Espada de Talzin en sus manos.
Ahsoka, Sabine y Huyang se quedan atrapados en Peridea
Derrotada Morgan Elsbeth, se produce el momento de salir de Peridea. Con la nave ya reparada por parte de Huyang, este recoge a Ahsoka y Sabine, procediendo a seguir al destructor de Thrawn, el cual ya esta dispuesto en el Ojo de Sion para realizar el salto al hiperespacio y salir de esa galaxia. Cuando la nave está próxima a alcanzar el transporte enemigo, Thrawn contacta con Ahsoka para despedirse de ella, aunque nunca antes se habían cruzado, siendo en este instante cuando el líder imperial le revela a la Jedi que conocía a Anakin y que ha empleado su conocimiento sobre él para anticiparse a sus movimientos, dejándole claro que Peridea quizás sea el sitio perfecto para una Ronin como ella, término acuñado para referirse a aquellos samuráis que no tenían señor.
Después de esta breve conversación, el destructor salta al hiperspacio, propiciando que con el impulso de los motores del Ojo de Sion, la nave de Ahsoka, Sabine y Huyang, sea repelida, quedándose de esta manera atrapados en Peridea.
Baylan Skoll y Shin Hati por caminos distintos
En los minutos finales del episodio vemos como Baylan Skoll (Ray Stevenson) está situado encima de una estatua gigantesca, pero no se logra vislumbrar muy bien de quien se trata, cuando de repente el plano de se abre y nos damos cuenta de que estamos ante tres estatuas que representan a los Dioses de Mortis, que ya vimos en un mural en la serie de Star Wars: Rebels. Lo que busca Baylan sigue siendo una incógnita por resolver, aunque se especula con que pueda ser Abeloth.
Shin Hati (Ivanna Sakhno) por su parte, tras ser abandonada por Baylan, vemos como acude al asentamiento de los Bandidos de Peridea, con la posible intención de erigirse como su líder.
Thrawn y las Grandes Madres se dirigen a Dathomir
Dathomir parece que se convertirá en la base de operaciones del Almirante Thrawn, ya que se dirigen hacia allí nada más volver de Peridea, haciendo hincapié en los contenedores que porta en el interior de su destructor, de los cuales no sabemos su contenido.
Ezra se reencuentra con Hera y Chopper
Hera (Mary Elizabeth Winstead) y Chopper no podían faltar en este episodio final y su aparición se produce propiciando un esperado reencuentro con Ezra, quien ataviado con una armadura de Stormtrooper, recordando a momentos de Star Wars: Rebels, se presenta en la nave en la que estos dos viajan, dejando a ambos sorprendidos cuando le ven, dando paso a un momento emotivo cuando Ezra dice “Hola Hera, he vuelto”.
Anakin aparece como Fantasma de la Fuerza
Esta temporada 1 de Ahsoka nos ha regalado momentos para el recuerdo y uno de ellos sin duda fue el reencuentro entre Ahsoka y Anakin en El Mundo Entre Mundos, pero este último episodio ha albergado una última sorpresa. Ahsoka y Sabine, se encuentran viviendo con los Noti, al igual que hizo Ezra, cuando en un momento dado Sabine ve algo en el horizonte, que en realidad es el fantasma de la fuerza de Anakin (Hayden Christensen), quien se le ha aparecido a Ahsoka.
Además de la emotividad de la escena, nos damos cuenta que Sabine está desarrollando cada vez más su vínculo con la fuerza, pues aunque no lo ve, nota la presencia de Anakin.