Ahsoka sigue fascinando con un tercer episodio electrizante, titulado 'Hora de volar', que consigue, a pesar de su menor duración, mantenernos pegados al asiento y hacer las delicias de todo fan de la saga. Si el segundo episodio se caracterizó por un ritmo más pausado incidiendo y dotando de contexto a la trama, focalizándose a su vez en los sentimientos de personajes como Sabine, este tercero contiene acción por doquier, con revelaciones y apariciones que sin duda tendrán un peso importante en el argumento.
Resumen del Episodio 3 de Ahsoka
Tras dos primeros episodios en los que se sientan las bases de la temporada, el episodio de esta semana se introduce de lleno en la aventura que van a vivir los personajes.
Ahsoka y Sabine investigan la ubicación proporcionada por el rastreador que Hera y Chopper acoplaron en el hiperpropulsor que procedía de Corellia. Durante el trayecto al sistema Denab, Sabine retoma su entrenamiento, primero de la mano de Huyang, para posteriormente hacerlo con Ahsoka, con el objetivo de realizar el adiestramiento desde un enfoque distinto al de la primera vez. Para ello utiliza un método ya visto en el Episodio IV: Una Nueva Esperanza, cuando Obi-Wan hace entrenar a Luke ocultando su visión con un casco.
Los primeros pasos de Sabine con esta técnica, no son satisfactorios, pues Ahsoka, provoca con sus movimientos que se desoriente, lo que en un combate real sería letal, pero tras decirle que debe pensar menos y sentir más, se recompone y su técnica de combate empiece a fluir. Dejar a un lado la parte lógica y basarse más en el ahora, algo parecido a lo que Qui-Gon le dice a Anakin en La Amenaza Fantasma, antes de la carrera, -"Concéntrate en el momento, siente, no pienses, usa tu instinto." Está claro que Ahsoka intenta que Sabine cree un vínculo con la fuerza, intención que se ratifica en una escena posterior en la que ambas están sentadas en una mesa y Ahsoka atrae un recipiente a su mano con la fuerza, en un acto velado para despertar algo en el interior de su aprendiz.
Mientras tanto Hera, intenta convencer a un grupo de senadores de la Nueva República, para que autoricen destinar a un equipo para investigar el sistema Denab, argumentando para ello, que los aliados de Thrawn operan desde ese lugar para intentar la vuelta del mismo, pues según los últimos indicios este sigue con vida. Pero la realidad es que obtiene una negación como respuesta, siendo únicamente Mon Mothma la única que parece dar veracidad a su información.
Aproximándose a Denab, Ahsoka y Sabine, saben que están solas en esta misión, pues los refuerzos han sido denegados. Al instante, una vez avistado el Ojo de Sión, aparece un escuadrón de naves comandado por Shin Hati, con el objetivo de derribarlas e impedir que sigan investigando. Tras un férreo combate y con la nave tocada debido a los disparos de sus enemigos, Ahsoka, Sabine y Huyang, se adentran en el planeta Seatos con el objetivo de despistar a los remanentes enemigos, siendo en el trayecto cuándo se encuentran a unas criaturas en forma de ballenas, llamadas purrgils, que ya vimos tanto en la serie de animación Star Wars: Rebels, como en la temporada 3 de The Mandalorian.
Hasta aquí, lo sucedido a grandes rasgos, en un episodio con una duración más reducida que los dos anteriores. Pero que cuanta con importantes revelaciones y detalles que sin duda marcarán el devenir de la trama.
Esas ballenas espaciales llamadas purrgils
Como hemos destacado en líneas superiores, la aparición de estos seres llamados purrgils, pueden revolucionar el futuro de Star Wars.
La primera aparición de estas ballenas espaciales que viajan en grupo y pueden viajar a través del hiperespacio, tuvo lugar en Star Wars: Rebels, siendo su punto álgido cuando Ezra Bridger, consiguió crear un vínculo con estas criaturas para que estas, ayudaran a acabar con la Séptima Flota del Almirante Thrawn, durante la gran batalla que tuvo lugar en Lothal y que culminó con el propio Ezra y Thrawn siendo arrastrados al hiperespacio por unos purrgil. El otro avistamiento, tuvo lugar en el episodio 1 de la temporada 3 de The Mandalorian, titulado, El Apostata, siendo al comienzo del mismo cuando tanto Mando (Pedro Pascal) y Grogu, a bordo del caza estelar N-1 y viajando a la velocidad de la luz, ven unas formas de cetáceos en ambos flancos de la nave en cuestión.
La importancia de los purrgils deriva en las rutas de migración de estos, a través del hiperespacio, como hace referencia Huyang, "Los archivos Jedi mencionan carriles hiperespaciales entre galaxias que solían seguir las rutas de migración de ballenas estelares llamadas purrgil".
El hecho de que estas ballenas tengan la capacidad de acceder a otras galaxias abre un mundo de posibilidades, en cuanto a la narración de nuevas historias en la saga Star Wars se refiere.
El hijo de Hera, Jacen Syndulla
Uno de los momentos más reveladores del episodio es que Hera tiene un hijo llamado Jacen. Este personaje, para los que no hayan visto Rebels, puede no significar mucho, pero la realidad es que el niño es hijo del Jedi, Kanan Jarrus. Kanan fue un personaje muy querido por los fans de la serie de animación durante las 4 temporadas de la misma, en las que lucho contra el imperio junto a sus compañeros y adiestro en las artes jedi a Ezra. Sin embargo, en un giro de los acontecimientos, en el décimo episodio de la cuarta temporada titulado Noche Jedi, Kanan se sacrifica por salvar a Hera, Sabine y Ezra.
La relación entre Kanan y Hera, aunque había evidencias de la misma, no se supo hasta los episodios finales de Rebels, por lo que la revelación del hijo en común de ambos en el episodio final, fue toda una sorpresa.
Está por ver si Jacen Syndulla sigue los pasos de su padre y es instruido en las artes jedi, atenor de las palabras que le dice a su madre en el episodio, parece tener bastante claro que sí.
La influencia samurái en Ahsoka
Llama la atención, el enfoque que Dave Filoni ha querido aportar al personaje interpretado por Rosario Dawson, si nos damos cuenta, veremos que existe una gran influencia de la cultura samurai en ella, desde la vestimenta hasta las posiciones de combate. En cierta manera, parece, que la intención es acercar a Ahsoka Tano a lo que sería un ronin, un samurai sin señor del periodo feudal en Japón, hecho que tiene toda su lógica ya que ella dejó de pertenecer a la orden Jedi tiempo atrás.
La influencia samurái en la serie, no solo se limita al personaje de Ahsoka, si no, que queda patente en otras situaciones como, el entrenamiento de Huyang a Sabine en este episodio.
La composición musical de Kevin Kiner, también rememora con sus notas a otros títulos que versan sobre estos guerreros legendarios, evocando a bandas sonoras como la de El Último Samurái del compositor alemán Hans Zimmer. Mención especial en este apartado, a la composición utilizada para acompañar a los créditos del final de cada uno de los episodios.
La serie de Disney+, confirma con cada episodio que podemos estar ante uno de los mejores títulos de la saga Star Wars, explorando nuevas facetas y abriendo nuevas posibilidades en el universo creado por George Lucas.
Puedes ver un nuevo episodio de Ahsoka cada miércoles en Disney+.