Hace más de dos décadas, la película 28 días después se convirtió en todo un icono del cine de terror, marcando tendencia en el género de zombis con una temática postapocalíptica donde una mutación del virus de la rabia hace estragos en Inglaterra al infectar a los humanos. Dirigida por Danny Boyle sobre un guion de Alex Garland (Civil War), el filme fue un pelotazo en taquilla al recaudar 86,6 millones de dólares a nivel mundial, cuando su presupuesto fue de apenas 8 millones de dólares, poseyendo una fotografía muy característica que le confería un aspecto de película casera de forma intencional.
Marcado en rojo el calendario lo que será el estreno de la tercera entrega de la saga titulada 28 años después, contando con el retorno de Boyle y Garland tras no haber participado en la segunda parte, la cinta se anticipa como uno de los estrenos más destacados de 2025 con un reparto destacado compuesto por Jodie Comer, Ralph Fiennes y Aaron Taylor-Johnson. Cillian Murphy por su parte también hará acto de presencia en el largometraje, volviendo a la saga que catapultó su carrera como actor gracias a protagonizar la primera entrega.
28 años después dará el pistoletazo de salida a lo que pretende ser una nueva trilogía, habiendo visto incrementado el presupuesto de esta nueva entrega hasta los 75 millones de dólares, un cambio sustancial que quedan muy lejos de esos apenas ocho de 28 días después. Sin embargo, lo que no ha cambiado es la innovación por parte de Boyle a la hora de abordar el rodaje, escondiéndose detrás de este una peculiaridad sorprendente.
Danny Boyle ha rodado 28 años después con iPhones
Cuando hablamos de grandes producciones cinematográficas o televisivas, los medios de grabación utilizados suelen ir acorde, habiendo grandes avances en el campo de las cámaras, algo que debería ser extrapolable a 28 años después, pero no ha sido así. Según ha podido confirmar el medio Wired, Boyle y el director de fotografía, Anthony Dod Mantle, tomaron la decisión de realizar la filmación con varios iPhone 15 Pro Max adaptados para el rodaje, siendo un dato que llama poderosamente la atención, aunque no es una novedad en el caso de Boyle. El también director de cintas como Sunshine y Slumdog Millionaire, ya optó por utilizar una cámara digital para la filmación de 28 días después, concretamente una Canon XL-1 que se caracterizaba por grabar los datos en cintas MiniDV, y cuyo coste ascendía en aquel momento a 4.000 dólares.
Boyle no es el único que ha experimentado recientemente con los métodos de filmación, pues Gareth Edwards también optó por un camino similar en el rodaje de su última película. En The Creator, película de ciencia ficción protagonizada por John David Washington, Edwards también fue noticia a este respecto por rodar con una cámara inusual para los estándares actuales de la industria de Hollywood, concretamente una Sony FX3 que literalmente puede ser adquirida en un comercio minorista.
Parece claro que optar por la utilización de iPhones para el rodaje de 28 años después puede volver a suponer un potencial impacto en el resultado final del filme al igual que ocurriese con 28 días después, siendo algo que se podrá comprobar como pronto cuando se lance el primer tráiler y posteriormente en mayor profundidad cuando se produzca el estreno en cines el 20 de junio de 2025.
