Podemos decir que, Christopher Nolan, es uno de los mejores directores de la industria del cine y Oppenheimer es una clara muestra de ello. A pesar de las dudas que existían antes del estreno, por ser una historia no tan comercial, la cinta basada en el creador de la bomba atómica, está siendo un éxito rotundo y lo es en gran parte por el mismo y dedicación que el cineasta les imprime a todas sus obras.
Si algo ha dejado claro Nolan con su filmografía es que ha sabido adaptarse a cualquier género, ya sea acción, ciencia ficción, bélico o biográfico, haciendo siempre una película a la altura de las expectativas.
Una cinta de Bond siempre en el horizonte
Durante mucho tiempo, se viene especulando con la posibilidad de que, Nolan, sería el idóneo para dirigir una película de James Bond y esto no es mera especulación, puesto que el propio realizador ha hablado en más de una ocasión de su predisposición a llevarlo a cabo en caso de darse la oportunidad correcta y lo cierto es que actualmente sería el momento perfecto, con una nueva película en ciernes del espía británico.
La última adaptación de 007 con Daniel Craig, se caracterizó por un tono mucho más oscuro y dramático, en contraposición de versiones pasadas del personaje. Por lo tanto, en esta nueva etapa, el cine de Nolan encajaría a la perfección con los estándares de la última adaptación.
El desarrollo de los personajes como punto clave
Cuando nos fijamos en las distintas producciones de Nolan, nos damos cuenta que el personaje principal, destaca por un alto grado de profundidad y complejidad. Si atendemos a la etapa más reciente de James Bond, estamos ante la versión más dura y emocional del personaje, destacando como hacen mella las distintas vivencias en él. Este tipo de figura ya se lo hemos visto plasmar al director inglés, siendo Bruce Wayne una muestra de ello.
Al analizar las películas del caballero oscuro, protagonizadas por Christian Bale, no es descabellado pensar que esa misma fórmula sería idónea para la nueva cinta de 007. Elementos como la seriedad, la elegancia y la valentía, están muy presentes en el Bruce Wayne del actor galés, características inherentes que cualquier Bond debería tener.
Además de la saga de la trilogía de Batman, existe una película en la filmografía de Christopher Nolan, que quizá es lo más parecido a lo que una cinta de 007 puede ofrecer y esta no es otra que Tenet. El título en cuestión, cuenta con una trama al más puro estilo del personaje creado por Ian Fleming, obviando evidentemente la parte de los viajes temporales, el filme es un thriller de espías repleto de acción y secuencias vertiginosas alrededor de distintas localizaciones del mundo, además, de la siempre presente atracción femenina.
Si analizamos los personajes principales de Tenet, interpretados por John David Washington y Robert Pattinson, es evidente que ambos cumplen con las habilidades y características que un agente del MI6 debería tener.
Villanos a la altura
Uno de los puntos más destacados de las películas de James Bond, son sus villanos. A lo largo de las 27 cintas del personaje, han aparecido antagonistas emblemáticos como el Dr. No, Goldfinger, Le Chiffre o Blofeld, entre otro. Todos ellos, sobre todo los de la etapa de Daniel Craig, complejos a nivel psicológico.
Si repasamos los villanos de las películas de Nolan, nos damos cuenta de que la creación de estos personajes está muy cuidada a nivel narrativo, pero de entre todos ellos vamos a detenernos en dos, Ra’s al Gul y Andrei Sator. El primero de ellos interpretado por Liam Neeson, es un personaje muy inteligente, astuto, metódico y con unos ideales muy marcados, por los que está dispuesto a realizar lo que haga falta, solo hay que ver su percepción de la ciudad de Gotham en Batman Begins. El segundo, en manos de, Kenneth Branagh, es mucho más sanguinario e impulsivo y su puesta en escena en Tenet, demuestra que es un personaje sin escrúpulos.
Ambas figuras son el prototipo perfecto de lo que podría ser un enemigo de Bond. Dependiendo del enfoque de la cinta, se podría optar por cualquiera de los dos perfiles, siendo este otro punto a favor del director británico.
Las secuencias de acción
Durante los más de 50 años de existencia de la saga de, James Bond, esta se ha caracterizado siempre por contar con grandes secuencias de acción y todo tipo de persecuciones, situaciones que aportan tensión a la trama. Si hay algo por lo que el cine de Nolan se ha caracterizado es por la grandilocuencia de algunas de sus escenas. De entre las producciones del director londinense, destacan por estos aspectos, la trilogía de Batman, Origen (2010) y Tenet (2020), situaciones como la persecución del, Joker, en El Caballero Oscuro (2008), la infiltración en la base militar con ese paisaje nevado de Origen o la escena del avión en Tenet, son extrapolables a cualquier cinta del agente del MI6.
Después de más de dos años desde el estre de Sin Tiempo Para Morir, poco o nada se sabe de la que será la vigesimoséptima entrega de la longeva franquicia. Pero lo cierto es que, Christopher Nolan, sería el director idónero para comandar esta nueva etapa, porque sus trabajos previos, expreriencia en grandes producciones y gran dedicación, así lo avalan.