El cine de superhéroes cambió para siempre en al año 2008 con el estreno de El caballero oscuro, convirtiéndose en un referente absoluto del género, siguiendo la estela de Batman Begins, la cual tres años antes ya supuso toda una revolución para el mítico personaje de DC, gracias a la visión única que Christopher Nolan le imprimió a este, unido a la interpretación de Christian Bale, mostrándolo como nunca antes se había visto en pantalla, presentando una versión completamente realista que se alejó de cualquier tipo de fantasía.
El caballero oscuro está considerada por muchos como una de las mejores películas de la historia del cine, dejando una gran cantidad de escenas para el recuerdo, motivado por una historia oscura y dramática, donde Heath Ledger sobresalió con una actuación magistral del Joker, la cual a la postre la valdría el Oscar póstumo tras su trágico fallecimiento. Todos los elementos que confluyeron en El caballero oscuro le confieren la categoría de obra maestra, sin embargo, estuvimos a punto de quedarnos sin ella, debido a las reticencias que tenía Christopher Nolan a la hora de abordar la secuela de Batman Begins, teniendo miedo de quedar encasillado en el género de superhéroes, tal y como ha revelado su hermano Jonathan durante una entrevista en el podcast "Armchair Expert" con Dax Shepard (vía Variety), afirmando que hubo que convencerle para que se decidiese a hacerla, pues antes incluso había dirigido El truco final.
Chris estaba indeciso acerca de hacer otro [señalando que Chris pasó directamente de "Batman Begins" a dirigir el thriller de magos "El truco final”. No quería convertirse en director de películas de superhéroes.
Jonathan señala que Christopher estaba “muy orgulloso” de Batman Begins, pero “para mí, fue como si hubiéramos construido este increíble coche deportivo, y dije: 'Vamos a llevarlo a dar una vuelta'. ¿No quieres hacer otra?
Inmediatamente después de esto, Jonathan cuenta que se les ocurrió cambiar el tono de la continuación, acercándose más a lo que es un thriller de acción donde el crimen predomina, basándose en películas de este estilo como Heat dirigida por Michael Mann.
Pasamos una hora contando la historia del origen, y eso es genial, pero pensamos, '¿qué [más] podemos hacer con esto?'”, recordó Jonathan haberle dicho a Chris. “¿Podemos coger los mismos personajes y cambiar ligeramente a un género diferente? ¿Podemos pasar de una película de aventuras a una película sobre crímenes, a una película sobre la mafia, y aportar ese sentimiento?
Así que estaba literalmente sentado con [el productor] Charles Roven y Chris y les decía: 'Tío, no seas gallina de mierda. Hagámoslo'. Y sabía que con el guión - y él desarrolló la historia con David Goyer con un poco de aportación mía- era como el primer acto detallado, el segundo acto algo detallado, el tercer acto... eh, se va al final- una vez que teníamos el guión hecho, yo estaba como, 'Esto va a ser genial. Esto es emocionante. Tenemos que hacer esta película'. Y al final, entró en razón. Consiguió evitar que le encasillaran.
Nolan no solo consiguió que no lo encasillasen por un género, sino que además El caballero oscuro fue el impulso definitivo para convertirse en uno de los mejores directores del mundo, dirigiendo en 2012 el cierre de la trilogía de Batman con El caballero oscuro la leyenda renace, estando acompañadas de grandes éxitos como Origen, Interstellar, Dunkerque, Tenet o la reciente Oppenheimer, la cual le ha permitido ganar su primer Oscar a mejor película y mejor director.