Es difícil encontrar series que mantengan la tensión narrativa a lo largo de toda la temporada, habiendo en la mayoría de ocasiones episodios de transición incluidos en estas. Esta es precisamente una de las claves del éxito de Shogun, la cual de la mano de sus creadores Rachel Kondo y Justin Marks, han sabido adaptar a la perfección la intensidad de la novela homónima de James Clavell, no dando prácticamente un momento de respiro a los espectadores gracias a un constante flujo de acontecimientos relevantes para la trama.
A falta del último episodio, podemos decir que el de esta semana titulado Cielo Carmesí, ha sido el mejor y más intenso hasta el momento, promovido principalmente por un final impactante al mismo tiempo que trágico, relacionado directamente con el personaje principal de la serie que es Mariko (Anna Sawai), habiendo sido el eje central de toda la historia. Un episodio donde la acción transcurre íntegramente en Osaka, donde Mariko lleva a cabo el plan promovido de antemano junto a Toranaga (Hiroyuki Sanada), pero con un desenlace imprevisto que acaba con la muerte de Mariko tras el ataque al castillo de los shinobi, promovido por Ishido y con la colaboración de Yabushige (Tadanobu Asano), quien a lo largo de los episodios había caminado entre la traición y la lealtad a Toranaga, decantándose finalmente por lo primero.
La muerte de Mariko derivada de una explosión, tiene de por sí tintes de tragedia, pero esta aumenta exponencialmente si tenemos en cuenta que instantes previos se había salvado de cometer seppuku y que nuevamente parecía que su relación con Blackthorne (Cosmo Jarvis) podía asentarse. Si repasamos la historia de Mariko, nos damos cuenta que es un personaje que ha bordeado un desenlace como este, habiendo estado marcada por el infortunio desde que su padre matase al anterior gobernante y posteriormente se viese atrapada en un matrimonio infeliz con Buntaro (Shinnosuke Abe), habiéndole negado este durante años la petición de quitarse la vida, esencialmente por el sentimiento de Mariko de verse atrapada en una vida que no deseaba.
Durante el podcast semanal de Shogun compartido por FX (vía Screen Rant), donde se repasan los acontecimientos de cada uno de los episodios, el director de este último, Frederick E.O. Toye, ha abordado el ataque al castillo por parte de los shinobi, ayudados por Yabushige, siendo una pieza clave debido a la imprevisibilidad de sus actos, pues acontecimientos recientes llevaban a pensar que su fidelidad a Toranaga era absoluta.
Así que cada cosa que pasa... Yabu permite al equipo entrar por la puerta de atrás. Hacer de eso un momento Yabu, eso fue lo crítico. Como, está bien, va a haber un poco de humor. De repente, después de todo esto, Yabu se pasea por el pasillo actuando de forma sospechosa. Hay un sentido del humor en eso, así que es como si algo fuera a pasar. Quería que la entrada fuera un momento Yabu...
Escribimos una historia para todo lo que estaba pasando, pero era efectivamente: infiltrarse en el castillo y encontrar a Mariko, y tomarla como rehén. Lo que esperábamos era esta mezcla de acción sutil pero también humor, poder cortar hacia atrás a Yabu. Pero en última instancia, cuando llegamos a la habitación y Blackthorne y Mariko están juntos, que eso no sea, ya sabes, Blackthorne tiene la sartén por el mango sobre todo el mundo y que de repente se convierte en una secuencia de héroe, aunque siguen estando totalmente en peligro.
El destino de Mariko marcará indudablemente el final de 'Shogun'
Este triste final de Mariko, es en pos de un bien mayor, proviniendo de la disposición de Mariko de sacrificarse por un bien mayor, renunciando a sus sueños de futuro, quizá junto a Blackthorne, pero según explica Toye, a través de este acto es como se cimenta la historia de Japón.
Creía tanto en su señor y en el plan de Toranaga que estaba dispuesta a dar su vida por ello. Ella estaba dispuesta a renunciar a las cosas que eran sus sueños de libertad, y a otras cosas que la acercaban a Blackthorne. Pero en última instancia, en ese momento, estás viendo física y literalmente que su papel en la historia de Japón se cimenta con este sacrificio que ella hace...
El acto llevado a cabo contra Mariko, evidentemente marcará el episodio final de la temporada, pero no solamente en gente como Toranaga o Blackthorne, que es indudablemente que sí, sino también está por ver si también en la propia Ochiba (Fumi Nikaido), quien no sabemos con certeza cómo responderá a la muerte de Mariko, teniendo en cuenta los sentimientos hacia ella.
Creo que el final es muy sutil, y creo que es un lugar al que no esperas llegar en el final de algo tan épico y enorme como este espectáculo. Y creo que la pérdida de Mariko se siente no sólo en Blackthorne y los otros personajes, y en la experiencia de Toranaga, sino que también tiene ese tipo de impacto en la historia que sientes cuando ves el episodio. Porque el episodio final comienza a presentar el contexto histórico de todos estos eventos que hemos estado observando desde el punto de vista de los personajes.
Estando a un episodio del final, Shogun se ha convertido en una de las series más destacadas de los últimos tiempos, pudiendo asentarse definitivamente en el Olimpo dependiendo de la conclusión que se le de, algo que siempre es muy importante.